COMPONENTES

ELISA DEL AMO JEREZ
SILVIA ENGRA ROSELL
MARIA DOLORES TÉBAR DOCÓN

lunes, 15 de octubre de 2012

ANCIANO SANO, ENFERMO Y FRÁGIL.

No solamente entendemos al anciano como persona enferma o sana, entre estas dos definiciones cabe definir otra, la del anciano FRÁGIL.

El concepto de anciano frágil o de fragilidad no tiene una fácil definición, además esta ha ido variando a lo largo de los años, dependiendo del contexto y de diferentes autores.

Ser dependiente o estar en riesgo de dependencia, pérdida de reservas fisiológicas, desacoplamiento con el medio, cronicidad de la enfermedad, problemas médicos y psicosociales, presentación a típica de la enfermedad, ser potencial beneficiario de atención geriátrica o tener un envejecimiento acelerado es lo que entendemos como fragilidad. No debemos confundir la fragilidad con la discapacidad, ya que tiene dos grandes diferencias:

1. la causa: la discapacidad surge de la alteración de un único sistema o de varios. En la fragilidad  el componente es multisistemico.
2. la inestabilidad no va unido a discapacidad, mientras que es un componente intrínseco de la fragilidad.

Entendemos que la fragilidad no es el estadio previo de la discapacidad, si no que es la predisposición al desarrollo de discapacidad.
Para la definición de anciano frágil se han propuesto cuatro criterios que a la vez son predictores de fragilidad:
- Criterios médicos: enfermedades crónicas, mala salud autopercibida, polifarmacia, ingresos repetidos.
- Criterios funcionales:  dificultad para realizar las ABVD (actividades básicas de la vida diaria).
- Criterios mentales: deterioro cognitivo, depresión.
-Criterios sociodemográficos: vivir solo, viudedad reciente, ingresos escasos.


No todos los adultos mayores tienen estas condiciones de fragilidad, y gozan de un envejecimiento saludable, el cual nos interesa distinguirlo del envejecimiento patológico para así intentar conseguir la normalidad el mayor tiempo posible y para realizar diagnósticos precoces de distintas patologías.

Antiguamente se acuñaba el termino enfermedad al de envejecimiento (teoría de la pérdida gradual), asumiendo que los sistemas orgánicos disminuían su función a partir de los 30 años. Se a demostrado que el avance la edad no influye en la conservación de las funciones fisiológicas de las personas, si no que la falta de uso de estas capacidades fisiológicas son lo que afecta a la salud física y mental.
De esta forma podemos decir que el envejecimiento normal o fisiológico es aquel que cumple los parámetros biológicos aceptados para cada grupo de edad, y se mantiene intacta la capacidad de relación, funcional, mental y social.
Para conseguir esto hay que actuar sobre los distintos criterios de los que hemos hablado anteriormente (aquí denominados áreas especificas de bienestar):


- Área clínica: el objetivo es una vejez saludable por medio de prevención primaria, secundaria y terciaria, diagnóstico precoz, tratamiento integral...
- Área funcional: cuyo objetivo es mantener la capacidad para realizar las ABVD, mediante prevención de accidentes, actividad física, rehabilitación...
-Área mental:  su objetivo es mantener la capacidad de contacto intelectual con otras personas por medio de  higiene y actividad mental, entrenamiento de la memoria...
- Área social: mantener plena integración social facilitando contactos, teniendo amplia cobertura económica...



El hecho de que se relacione anciano con enfermedad es sencillamente por que la vejez es la época de la vida en que aparecen más enfermedades o que muestra un camino o un desenlace distinto que si ocurre en otras etapas de la vida. Y también tenemos una situación biológica menos favorable para combatir algunas de las enfermedades.

Los ancianos viven la enfermedad de manera diferente a los jóvenes, ellos la sienten como una molestia, como una amenaza a su autonomía y a su propia vida, como una invalidez que les impedirá muchas cosas que hasta ahora realizaban con normalidad, y sobretodo como soledad, en el anciano agravada por la tendencia al aislamiento que le provoca la propia vejez.
En la causalidad de las patologías en ancianos podemos observar componentes de distinto origen:  orgánicos, psíquicos y sociales. Los aspectos sociales son muy importantes en la vejez, y condicionan mucho la aparición y el curso de una enfermedad.



BIBLIOGRAFÍA:
 Guillen F, Perez J, Petidier R. Síndromes y cuidados en el paciente geriátrico. 2ª Ed. Barcelona. Masson. 2008. p.120-136
Cervera M, Saiz J. Actuación en geriatría y gerontología. 5ª Ed. Jaen. Formación Alcalá. 2006.p.24-39