MIGUEL JIMÉNEZ ÁLVAREZ 13-10-2012
LA JUBILACIÓN
BIBLIOFRAFÍA
- Albarracín D, Goldestein E. Redes de apoyo social y envejecimiento humano. En: J. Buendía. Envejecimiento y Psicología de la Salud. 2ª ed. Madrid: Siglo XXI; 2004.p. 373 a 398
En primer lugar, comenzaré definiendo lo que es el concepto de jubilación que es el nombre que recibe el acto administrativo por el que un trabajador en activo, ya sea por cuenta propia o ajena, pasa a una situación pasiva o de inactividad laboral, después de alcanzar una determinada edad máxima legal para trabajar o edad a partir de la cual se le permite abandonar la vida laboral y obtener una retribución por el resto de su vida.
En el capitulo de este libro trata por una parte los principales objetivos que se deben tener en cuenta a la hora de orientar a un paciente sobre la jubilación y algunos de estos son:
- Aportar información suficiente que permita afrontar con más conocimiento y con herramientas específicas la orientación en la transición en procesos de jubilación.
- Favorecer la reflexión sobre esa realidad y ese momento vital para ser capaces de orientar fomentando la calidad de vida de los futuros jubilados y jubiladas.
- Entender la jubilación como otro momento del devenir de los sujetos, con particularidades propias. Otro, ni más ni menos, que otro momento del desarrollo, con grandes posibilidades para el desarrollo y el crecimiento personal.
- Conocer, para poder afrontar, aspectos psicosociales del envejecimiento, desasociando el significado de jubilación a las características culturales prejuiciosas del envejecimiento, tales como pasividad, inactividad, pérdida de estatus y poder, asimismo, afrontar con seguridad los temores e incertidumbres posibles, de las personas que viven esta etapa.
Por otra parte el capitulo habla de que aspectos tendrá que
tener en cuenta el orientador durante el proceso de orientación, como:
- La jubilación como tránsito continuo.
Para ello planificarán conjuntamente actividades: en el hogar, actividades
lúdicas, acciones profesionales independientes. Así como objetivos vitales que
se quieren conseguir, además de favorecer la planificación conjunta con el
resto de miembros con los que convive y conforman el sistema social y afectivo.
- Planificación de acciones igualitaria
ente hombres y mujeres, pero atendiendo a las diferencias de deseos,
necesidades, objetivos y valores. Los orientadores deberán ser lo más libres
posibles de los estereotipos culturales en cuanto a los roles de género y a los
valores y prejuicios sociales, igualmente propios de nuestra cultura, sobre la
jubilación y el envejecimiento.
- El desarrollo de habilidades personales
y el desarrollo psicológico: Planteando habilidades de comunicación
personales, estrategias de prevención de problemas psicológicos, estrés,
distimia, inestabilidad, favoreciendo un mayor autoconocimiento ante esta etapa
y conceptualizando la nueva situación. Nuevos objetivos personales, familiares,
sociales. Dando técnicas de autocontrol, relajación, planificación y gestión
del tiempo.
- La aceptación de la nueva realidad
física y mental. Informando y facilitando medidas preventivas de salud
física y psicológicas