COMPONENTES

ELISA DEL AMO JEREZ
SILVIA ENGRA ROSELL
MARIA DOLORES TÉBAR DOCÓN

lunes, 3 de diciembre de 2012

BIBLIOGRAFÍA 7





LA INMOVILIDAD EN EL ANCIANO.


Osorno Chica DA, Morelo Negrete LI. Inestabilidad,caídas e inmovilidad en el anciano.2006. Disponible en:
http://facultadsalud.unicauca.edu.co/fcs/2006/marzo/Inestabilidad.pdf


He escogido este articulo porque explica de forma muy completa el síndrome, además incluye una referencia a la valoración, algo que nos puede servir de ayuda en nuestro día a día como enfermeros.


Puede definirse como la pérdida del movimiento anatómico como resultado de los cambios en la función fisiológica secundario a degeneración y reducción en la actividad por desacondicionamiento. El control postural y la marcha son actividades complejas,  precisan de la interacción de varios sistemas para su correcta ejecución.  Se requiere de una perfecta coordinación entre la función perceptual sensorial, motricidad, condición física, cognición y estado de salud previo; asociado a condiciones externas como son la familia y el entorno.  En el envejecimiento suceden ciertos cambios fisiológicos que pueden dificultar una correcta movilización; la atrofia muscular  unida a fibrosis hacen que la contractura muscular sea más lenta, hay una reducción en el número de fibras musculares rápidas encargadas del trabajo isométrico.  Se considera que la fuerza muscular disminuye en un 15% entre los 30 y 70 años; además los ligamentos, tendones, superficies articulares y tejido conectivo ven reducida su capacidad amortiguadora. Por estas razones son frecuentes la debilidad muscular y el aumento de la resistencia articular.Cambios en otros órganos y sistemas también influyen en la movilidad,  Alteración en la visión, disminución en la sensibilidad propioceptiva y vibratoria, así como la velocidad de conducción nerviosa, unida a una menor respuesta postural refleja. La capacidad cardiopulmonar no sufre modificaciones; pero está limitada para la actividad física máxima.  Modificaciones en el acto de la marcha con aumento en la base de sustentación, enlentecimiento, mayor número de pasos, desplazamiento del centro de gravedad hacia arriba y adelante dificultando el manejo del equilibrio. Además,  la cabeza se balancea en sentido lateral con disminución en la amplitud del movimiento articular. Todas estas alteraciones conllevan que la marcha del anciano tenga un consumo energético mayor.

Principales patologías asociadas a inmovilismo.

CARDIOVASCULARES: Cardiopatía Isquémica,insuficiencia Cardíaca, arteriopatía periférica,ortostatismo.

 NEUROLÓGICAS: Enfermedad cerebrovascular, enfermedad de Parkinson, neuropatías periféricas, demencias.

REUMATOLÓGICAS: Artritis-artrosis, osteoporosis, polimialgia reumática.

 RESPIRATORIAS: Enf. Pulmonar Obstructiva, enfermedad pulmonar restrictiva.

Valoración.

Se hace necesaria una historia clínica con reconocimiento de las condiciones funcionales basales del paciente siendo de gran ayuda el conocimiento de su capacidad para autocuidado e independencia objetivada por  la realización de actividades básicas e instrumentales de la vida diaria, correlacionado con sus patologías y respectivos tratamientos. Conocer el medio familiar y situación mental-cognoscitiva del paciente también va a ser de gran utilidad. La exploración ha de ser muy completa con especial interés en la evaluación de sistemas cardiovascular, respiratorio, aparato locomotor y neurológico. Los pilares básicos de la movilización son la fuerza muscular, la amplitud del movimiento articular y el equilibrio, sin olvidar el estado sensorial (visión, audición) y la sensibilidad (superficial, profunda y estereoagnósica).Debemos observar los movimientos del cuello y miembros, capacidad de flexión y giro siendo muy importante el reconocer si puede movilizarse y levantarse de la cama o el sillón.  Existen múltiples escalas para definir la movilidad  y capacidad funcional.